Por Ignacio García
A pesar de que el Código Penal del estado estableció que los partidos políticos deben postular la misma cantidad de hombres y mujeres para competir por las presidencias municipales, en los ayuntamientos las administraciones están integradas en su mayoría por varones, quienes ocupan los cargos directivos, de acuerdo con el Índice Nacional de Transparencia Gubernamental, de acuerdo con el estudio del Laboratorio Nacional de Políticas Públicas.
El estudio reveló que de los 84 ayuntamientos del estado, en 72 la mayoría de las administraciones municipales son integradas por varones, de quienes el 65 por ciento ocupan cargos directivos, mientras que el 79 por ciento de las mujeres ejercen puestos operativos.
De acuerdo con el Laboratorio Nacional de Políticas Públicas, la mayor disparidad de género en el estado se acentúa en municipios rurales, donde la mayoría de los trabajadores son hombres, mientras que las mujeres tienen mayor participación en las demarcaciones urbanas.
De la misma manera, son los municipios donde no existe una reglamentación para garantizar la inclusión específica de las mujeres en los puestos directivos, debido a que la mayoría de estos son ejercidos por mujeres sin que exista algún tipo de variabilidad y accesibilidad para este sector de la población.
Asimismo, el estudio del Laboratorio Nacional de Políticas Públicas encontró que los ayuntamientos no están interesados en la conformación de paridad de género de mujeres y hombres en espacios directivos y operativos de las administraciones públicas locales, pese a que también identificaron que el 56 por ciento de las mujeres que trabajan en el sector público están más preparadas para desempeñar esas labores.
Karina Baltierra Campos, investigadora de Estudios de Género y Políticas Públicas del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), expuso que pese a que en las administraciones públicas estatales se han impulsado los esquemas de gabinetes paritarios y se ha enfatizado en las acciones afirmativas en los Congresos estatales, en los municipios no hay esta condición.
La integrante del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) expresó que la burocracia local está conformada en su mayoría por los hombres, quienes perciben también los sueldos más elevados con respecto a las mujeres, a quienes se les ha relegado a funciones estrictamente operativas como pueden ser de asistencia o de secretarias.
Por ello, la académica expuso que es necesario que se impulse un servicio profesional de carrera que se enfoque en contar con las personas mejor preparadas para ocupar cargos en la administración pública, para que ejerzan sus funciones conforme su experiencia y preparación y no por la lealtad o amistades que existan al respecto con el presidente municipal en turno, lo que deteriora la capacidad de actuación de los gobiernos locales.
También aseveró que se deben generar políticas de inclusión para que las mujeres que ocupen un cargo en la administración pública local puedan desempeñarse en distintos cargos locales, debido a que no existen condiciones adecuadas para garantizar el ascenso administrativo del sector público.
Verónica Lugo Hernández, representante de la colectiva Mujeres Iguales, mencionó que la lealtad es un elemento que se prioriza al momento de conformar las administraciones públicas municipales, aunado a que la mayoría de las mujeres sufren el machismo que permanece en el sector público para inhibir que ocupen cargos directivos.
La activista aseveró que se tendría que impulsar una reforma orgánica administrativa que contemple la integración paritaria de los puestos públicos en los ayuntamientos, pues en la actualidad persisten las condiciones de precariedad en el sector público.
Además, comentó que esto provoca que persista la brecha de desigualdad salarial que obtienen menores recursos económicos con respecto a los varones, lo cual ha generado que no existen condiciones idóneas para atender a la población que padeció algún tipo de agresión de este tipo.
Por su parte, Beatriz, trabajadora del área administración de licencias y Funcionamientos del ayuntamiento de Nopala, refirió que no hay condiciones adecuadas para que las mujeres puedan escalar en el ámbito local, ya que constantemente son menospreciadas o padecen algún tipo de acoso laboral o incluso sexual.
“He visto que hay compañeras que por temor a no denunciar permiten que les digan piropos o hasta hagan algunos comentarios ofensivos que pueden ser provocativos”, comentó la trabajadora administrativa, quien prefirió no dar a conocer su identidad completa para evitar represalias.
“Ni siquiera respetan a las compañeras incluso hasta por la forma en la que se visten”, relató la trabajadora, quien dijo que esta situación se ha observado en varios gobiernos municipales sin que se atiendan esas condiciones de violencia que persisten en el sector público.
En la actualidad sólo 15 municipios del estado son gobernados por mujeres, lo que representa una reducción de cuatro demarcaciones con respecto al total de alcaldesas que existían en 2016, cuando se desempeñaban al frente de los ayuntamientos 19 mujeres.