Por Carlos Camacho
Si el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) aspira a ganar “carro completo” en las elecciones del próximo 2 de junio del 2024, primero tendrá que analizar el desempeño de quienes ocupan un cargo de elección popular amparados en el partido guinda, particularmente en municipios como Tepeapulco, Tizayuca, Actopan e Ixmiquilpan, donde las alcaldesas han encontrado piedras en el camino, que les impiden lograr una buena calificación ciudadana y en consecuencia difícilmente podría refrendarles su apoyo el próximo año.
Sí es muy probable que Morena gane de nuevo las dos senadurías de mayoría, las siete diputaciones federales y mayoría en el Congreso local, pero los municipios, eso es otra cosa y ahí es donde los partidos de oposición, incluso los aliados de Morena, fijan sus esperanzas de ganar espacios y evitar que Morena los avasalle.
Surgen como ejemplos de inestables gobiernos municipales, los casos citados líneas arriba, pues con sus particularidades, enfrentan serios problemas de gobernabilidad e inestabilidad social, por diversas causas.
Por ejemplo, en Tepeapulco, la alcaldesa Marisol Ortega, se ha confrontado con sus regidores, por el tema de la donación de un terreno adquirido a sobreprecio, con cargo al erario municipal, para construir el Banco del Bienestar. En Actopan, hoy se confrontan vecinos y regidores con la alcaldesa Tatiana Angeles Moreno, por el tema de la recolección de basura; antes lo han hecho por una ciclovía o por el tianguis de los miércoles.
En Ixmiquilpan, critican los vecinos la inacción de las autoridades para frenar los niveles de inseguridad y acusan a la presidenta municipal, Araceli Beltrán (PT) de aprovechar su cargo para hacer negocios con las obras no solo en su tierra, sino en los municipios vecinos. Con frecuencia la plaza principal es escenario de diversas manifestaciones de protesta contra la alcaldesa.
Y en Tizayuca, donde gobierna Susana Angeles, la situación se ha salido de control con la operación de bandas del crimen organizado, por el control de las rutas de transporte público, lo que ha obligado a una inusual acción del gobierno al enviar camionetas de transporte público de Pachuca, para brindar el servicio, pues los choferes de la zona han decidido suspender sus actividades por el temor de ser asesinados, como ya ocurrió en días pasados.
Ah, las camionetas que operarán de manera temporal, serán conducidas por uniformados de la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo (SSPH).
Son estos, cuatro ejemplos de que las autoridades locales no gozan de buena aceptación ciudadana y con el proceso electoral más importante del país en puerta, los opositores aprovecharán la coyuntura en busca de arrebatarle esos espacios a Morena.
Ya iremos viendo cómo avanzan las cosas.