Por Carlos Camacho
En el contexto de la violencia que padecen los habitantes de Tizayuca y particularmente los trabajadores del transporte público, local y foráneo, sometido por el crimen organizado, directivos de la escuela secundaria “Elisa Acuña Rossetti” decidieron suspender por tiempo indefinido las clases presenciales, con el argumento muy válido de salvaguardar la integridad física de alumnos padres de familia y personal que labora en el plantel.
Ayer por la mañana fue asesinado en Tecamac, Estado de México, el chofer de una unidad de transporte que atiende la ruta México-Tizayuca y horas más tarde las autoridades policíacas informaron respecto de la captura de uno de los cuatro autores materiales del crimen, cometido apenas despuntando el sol.
¡Que venga el Ejército! Es el clamor de transportistas y vecinos de que han padecido días de intranquilidad y noches de insomnio por la vuelta al desorden provocado por grupos delictivos que desde hace meses someten a los trabajadores del transporte público, a quienes se les imponen cuotas para permitirles realizar su trabajo con “tranquilidad”.
Quien se resiste sufre las consecuencias y para demostrar que no están jugando, los criminales, ya se han cobrado la vida de al menos dos choferes, el más reciente apenas ayer por la mañana.
Los cuerpos de seguridad estatales y municipales, acordaron reforzar la vigilancia, incluida la Guardia Nacional, para vigilar las carretas en la ruta Ciudad de México-Tizayuca, para evitar cualquier ataque a los choferes.
Algo falló, que luego autoridades del gobierno estatal prometieron acciones para reforzar la vigilancia y dar seguridad a los transportistas, se cometió otro crimen. Si bien uno de los cuatro ejecutores del trabajador del volante ya fue detenido, concesionarios, choferes y ciudadanos no se sienten seguros.
DE ahí la reacción de los directivos de la secundaria “Elisa Acuña Rossetti”, quienes informaron respecto de la suspensión de labores presenciales hasta nuevo aviso. Mientras tanto laborarán como en los tiempos de la pandemia provocada por el Covid-19, que por cierto ha vuelto en forma de otra variante y al menos en una escuela de Pachuca, se detectaron 15 casos, en una aula de 34 alumnos.
Las autoridades municipales de Tizayuca, simplemente han sido rebasadas y la alcaldesa Susana Angeles Quezada, está más entusiasmada por el trabajo hecho en favor de su candidata a la presidencia de la República, Claudia Sheinbaum, mientras el municipio se le va de las manos.
A la presencia de los grupos delictivos, se suma la falta de atención hacia diversos grupos sociales y las agresiones a los comerciantes, que en días pasados, derivaron en cierre de caminos y ataques a oficinas públicas, como muestra de rechazo a la alcaldesa que, ajena a lo que ocurre en su municipio, busca ser candidata a otro cargo de elección popular, al cobijo de la bandera del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
