Por Catalina Martínez Duarte
Con un Tulancingo que no muestra avance en materia de respeto y protección a las mujeres, entre funcionarias que revictimizan a quienes denuncian violencia de género; ayer se desarrollaron marchas pacíficas #8M entre consignas “Hey idiota los niños no se tocan!, “Las niñas no se tocan, no se violan, no se matan”, ¡Justicia para Lupita¡, ¡Justicia para todas!
Este tipo de movimientos fue iniciado por el Colectivo Feminista Mujeres del Tule fundado y encabezado por Morrigan, que sumo el cuarto año de activismo, declarando la nula respuesta de las autoridades en la petición de respeto y prontitud en las instancias que llevan los procesos legales y de protección a las féminas.
“Pedimos justicia por todas las violencias que vivimos, estamos trabajando en especial en la Vicaria (dañar a la mujer a través de sus seres queridos y especialmente de sus hijas e hijos) ya que el 80% por ciento de casos que nos llegan es en ese sentido”.
Presentando su 50 Mercadita Morada dando oportunidad a que ellas con la vendimia de diferentes productos, en esta ocasión acompañadas de esposos, hermanos o amigos quienes atendieron los changarros, en tanto las mujeres se unieron al contingente que recorrió calles del primer cuadro de Tulancingo, bajo los intensos rayos del sol.
Docenas de carteles con demandas, “la antigüita te regala agüita” decía uno, “para que aguanten la caminata” ofertaban; apoyadas por nuestras congéneres uniformadas hicieron el recorrido de frente a la Catedral Metropolitana “la que no brinque es macho”, mientras avanzaban saltando, hasta llegar al mismo punto de partida.
Corearon; Que tiemble el Estado, los cielos, las calles, Que tiemblen los jueces y los judiciales.
Hoy a las mujeres nos quitan la calma, Nos sembraron miedo, nos crecieron alas. A cada minuto, de cada semana, Nos roban amigas, nos matan hermanas, Destrozan sus cuerpos, los desaparecen, No olvide sus nombres, por favor, señor presidente.
Pañuelos al cuello, a la cabeza, playeras con leyendas “Vivas las queremos”, tomando a sus hijos de la mano, cargando bebes, “No habrá nunca murallas tan altas, que mujeres organizadas no puedan derrumbar”.
Ahora la convocatoria fue también para profesionistas que donarán su tiempo y labor en defensa de las mujeres, un abogado llevara gratis un juicio de pensión alimenticia, mientras que unos decidieron dar pláticas en la jornada 8M, en total nueve profesionistas se sumaron a la causa.
Una vida digna, servicios de calidad como los de salud “que no nos nieguen el derecho a protegernos con anticonceptivos, acudimos a los centros de salud y nos dicen que no tienen”; incluso mencionaron las próximas elecciones: “que sean personas comprometidas por hacer que los derechos humanos se respeten”.
Por la tarde-noche se dieron más actividades, caminatas silenciosas, entre el negro y la luz de las velas: Libres!!, no valientes, por todas las desaparecidas, muertas violentamente, por las que a diario viven en entornos donde sus costumbres, sus crianzas, la necesidad de trabajo, las tiene reducidas a la nada: “Yo todo lo incendio, yo todo lo rompo, Si un día algún fulano te apaga los ojos, Ya nada me calla, ya todo me sobra, Si tocan a una, respondemos todas”.
