El Sello de la Administración de Araceli Beltrán.
Por Arturo González Alanís
Faltan sólo dos meses y menos de 15 días para que concluya la actual administración municipal de Ixmiquilpan, donde perdió el rumbo la alcaldesa Araceli Beltrán Contreras, dedicándose a gobernar con ocurrencias, sumida en su ambiente de frivolidades, olvidando dar repuesta a necesidades y exigencias cotidianas de los casi 100 mil habitantes de las 150 comunidades, barrios y colonias, sobre todo en materias de obra y seguridad pública.
Apenas la semana anterior, las omisiones de la presidenta municipal por sí mismas fueron constatadas mediante airada y enésima movilización de protesta, en la sede del ayuntamiento, donde vecinos de la comunidad de El Espíritu reclamaron incumplimiento de acuerdos y negativa de obras, así como con el hallazgo de otras dos personas ejecutadas, en la comunidad de San Nicolás, muy cerca de la vivienda de la propia “jefa” del gobierno local.
El indignado grupo vecinal de El Espíritu acusó que en los últimos tres años Araceli Beltrán no les ha cumplido con la obra de un Centro de Atención Integral, programado desde el 2022; dejando pendiente también la construcción de un techado, desde el 2023; además de que ha negado entregarles 800 mil pesos, para otro proyecto acordado en el presente año, ante lo cual ni siquiera les ha dado la cara para ofrecerles explicaciones.
Inclusive, al tiempo que bloquearon calles aledañas al jardín de la Plaza Juárez y Centro Histórico, los más de 200 manifestantes colocaron cartulinas con leyendas de reproche, en fachada y columnas de la alcaldía: “Araceli Beltrán no seas irresponsable”, “da la cara al pueblo como cuando andabas campaña”, “No que mucho amor al pueblo”, “ten un poquito de vergüenza y cumple tus obligaciones”, entre otros reclamos.
Luego de varias horas de espera, los inconformes sí fueron recibidos en audiencia por Araceli Beltrán pero no informó públicamente si estará o no en posibilidades de cumplir aquellos compromisos, mientras que los vecinos afectados acusaron que previamente fueron insultados por una funcionaria menor de la alcaldía, además de amenazar con demandarlos por atreverse a realizar la manifestación de protesta.
A un día de dicha manifestación, durante la noche del martes 18 regresaron los fantasmas de la inseguridad y violencia, con el hallazgo de dos hombres torturados y ejecutados, dentro de una vivienda de la comunidad de San Nicolás, muy cerca del domicilio de la presidenta municipal, quien en esos momentos estaba muy ocupada en una festividad, celosamente resguardada por elementos de la policía ixmiquilpense.
No obstante el resurgimiento del temor de ixmiquilpenses, Araceli Beltrán ya ni se tomó la molestia de informar si solicitaría apoyo de la policía estatal y Guardia Nacional, contrario a muchas otras ocasiones en las que pregonaba “inmediato refuerzo” de vigilancia en distintos puntos de la cabecera y comunidades aledañas, zona que lamentablemente sigue a merced de la delincuencia, que a su vez ha cobrado más de 50 muertes durante actos violentos, en los últimos dos años y 11 meses.
Dicho sea de paso, también incrementó el hurto de vehículos en este municipio; por ejemplo, a mediados de la semana anterior, dejaron a pie a unos comensales de conocido restaurante, ubicado en límites del barrio El Fitzhi y comunidad de Dios Padre; sólo bastaron no más de tres minutos para que arribara una camioneta y de esta descendiera una persona, que de inmediato abrió el vehículo, para sustraerlo y de inmediato llevárselo con rumbo desconocido.
En medio de aquellos problemas sociales, Araceli Beltrán publicó en su página personal Facebook (a propósito de las recientes lluvias): “¡Qué bello se ve nuestro Ixmiquilpan después de días y meses intensos de calor!”, expresión que desató severas críticas en la misma red social, por parte de ixmiquilpenses, que coincidieron en reprochar:
“Pero se vería más atractivo nuestro Ixmiquilpan si estuviera bien resguardado y libre de inseguridad, con un Centro Histórico sin basura y limpio de puestos semifijos, con calles y avenidas reconstruidas y sin baches, así como con servidores públicos del ayuntamiento que no engañen al pueblo y sí cumplan con sus compromisos.”
