Columna Balcón Político
Por Carlos Camacho
A Israel Félix Soto la suerte le comenzó a sonreír cuando Omar Fayad Meneses asumió la gubernatura de Hidalgo y para proyectarlo políticamente, le creó su propia super secretaría, inexistente entonces: la de la Política Pública, para convertirlo en los hechos en una especie de vicegobernador.
El se encargó de adelgazar el “obeso aparato burocrático” del poder ejecutivo estatal. A él también se le atribuye ser el brazo ejecutor de los adversarios políticos de Omar Fayad.
Fue, Israel Félix, el personaje más cercano del entonces gobernador Fayad Meneses, quien le comenzó a construir su propia ruta hacia la sucesión en el 2022.
En una charla informal, en la ex hacienda La Concepción, fluyó la pregunta:
– ¿Por qué crear una secretaría ex profeso para Israel Félix y convertirlo en una especie de super secretario?
-A Israel Félix yo le doy el poder y yo se lo quito.
Efectivamente, cumplió con la primera parte, con la otra ya no le dio tiempo, pues trabajó en todo momento para allanarle el camino para que fuera su sucesor y operó incluso a pesar de la oposición de los dirigentes de su propio partido (Alejandro Moreno Cárdenas y Carolina Viggiano) para ungirlo como el abanderado del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
De Félix Soto se hablaban muchas cosas, que disponía de los recursos públicos para hacer su “bolsa” con la que financiaría su campaña. Se habló de la “Estafa Siniestra”, que habría sido inventada para obtener recursos suficientes para su campaña como candidato a gobernador.
En su ruta hacia la gubernatura, dejó la Secretaría de la Política Pública y luego se postuló candidato a alcalde de uno de los municipios más importantes de la entidad: Mineral de la Reforma, se le convirtió en dirigente de una organización que aglutinaba a los alcaldes priistas de Hidalgo, que entonces eran mayoría en la entidad.
Como alcalde y luego de perder la posibilidad de ser candidato a gobernador, coqueteó con el PAN, el PVEM, con Morena y todo aquel partido que se dejara. Su intención era buscar la candidatura a la presidencia municipal de Mineral de la Reforma para su esposa Shadia Martínez y la candidatura a diputado federal para él.
Más adelante, sin conseguir ese doble propósito pidió licencia como alcalde y dejó en su lugar a Fernando Escalante Sánchez, y comenzó a salir de la escena pública en espera de mejores momentos.
En tanto, su hacedor político, se convertía en embajador de México en Noruega y ahora se especula sobre su regreso a México, para continuar con tareas políticas en favor de Morena y en esa lucha impulsar a sus seguidores más cercanos, entre ellos Israel Félix.
Hoy, el ex alcalde de Mineral de la Reforma alcanza los titulares de diversos medios informativos, con malas notas, que hablan de posibles irregularidades financieras en perjuicio del erario público, por un monto de 287 millones de pesos, que incluyen en famoso “Aguinaldo Rosa”, con el que su esposa quiso granjearse la voluntad ciudadana que la llevara a la sucesión de su esposo en la alcaldía.
¿Habrá consecuencias?
Habría que preguntar a las autoridades que investigan el caso si hay sustento para iniciar carpetas de investigación para sancionar a los responsables.
Por lo pronto, el descrédito le llegó a joven Israel Félix.