Por Ignacio García
Durante los primeros tres años de la pandemia de Covid-19, en Hidalgo 100 mil 173 alumnos abandonaron las escuelas, pues en el inicio del ciclo escolar 2019-2020 había un millón 27 mil 948 estudiantes y en el reciente período escolar fue de 927 mil 206 escolares, de acuerdo con datos de la Secretaría de Educación Pública federal (SEP).
El reporte federal reveló que la pérdida de matrícula escolar fue de casi el diez por ciento, sin embargo, Hidalgo se ubicó en el quinto lugar a nivel nacional en cuanto al menor índice de deserción escolar, por lo cual ha sido una de las entidades que mayores crecimientos en el retorno a las aulas de estudiantes de nivel básico.
De acuerdo con la SEP, los niveles de mayor abandono escolar se presentan en la educación para adultos con un abandono del 49 por ciento, mientras que en el nivel inicial fue de 34 por ciento, en la extraescolar con el 30 por ciento y la media superior fue del 6.6 por ciento.
La institución educativa federal detalló que los niveles de educación escolar de mayor abandono ocurrieron entre la media superior y superior durante la contingencia sanitaria causada por la pandemia, mientras que en la educación básica el impacto fue mayor en los últimos dos años de primaria y secundaria.
Al respecto, el Consejo Nacional de Autoridades Educativas (Conaedu) refirió que las problemáticas de aprendizaje se agudizaron con la pandemia de Covid-19, ya que en los últimos grados de educación básica golpeó en mayor medida para los estudiantes de niveles socioeconómicos bajos.
El organismo nacional detalló que la falta de condiciones para la conectividad de los estudiantes durante el periodo de la virtualidad provocó que los alumnos dejaran las aulas, con lo cual el rezago educativo se profundizó de manera permanente en las comunidades rurales.
Con la reanudación de las actividades educativas presenciales, Hidalgo se situó entre los estados con mayores índices de reincorporación de estudiantes a las aulas, no obstante, cerró el ciclo escolar por debajo de los niveles previos a la pandemia de Covid-19.
Sobre esto, el titular de la SEPH estatal, Natividad Castrejón Valdez, refirió que desarrollaron diferentes estrategias para la recuperación de la matrícula escolar como el programa de salud emocional para el alumnado, así como un plan de regularización en todos los niveles educativos.
El funcionario estatal aseveró que las acciones que desarrollaron permitirán consolidar a Hidalgo como uno de los estados en donde los alumnos de educación básica están más interesados en formar parte del nuevo ciclo escolar que comenzará el próximo 28 de agosto.
Añadió que han trabajado con especialistas en materia educativa para garantizar un regreso progresivo y gradual de los estudiantes para que adquieran los conocimientos necesarios para su formación integral y transversal que garantice procesos de aprendizaje más robustos con mejores niveles de comprensión.
En tanto, Eduardo Balbuena Morales, investigador pedagogo de la Universidad Pedagógica Nacional (UPN), manifestó que el problema de la pandemia dejó una crisis en materia educativa más grave que la que existía previamente y no se han implementado las acciones necesarias para revertir las deficiencias en el modelo educativo para el nivel básico, medio superior y superior.
El también integrante del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) destacó que las personas sin acceso a internet no contaron con las herramientas necesarias para formar parte de la educación, por lo cual en esas zonas optaron por abandonar las aulas con el interés de regresar con la presencialidad, pero perdieron entre uno y tres años de procesos formativos.
“La brecha de desigualdad educativa se agudizó y probablemente México no alcance los niveles previos a la pandemia hasta dentro de cinco años”, declaró el especialista en materia educativa, quien recordó que por la virtualidad, distintos contenidos dejaron de abordarse de forma precisa y específica, pues los docentes tampoco conocían las formas adecuadas de impartir clases en línea y la mayoría no fueron capacitados al respecto.
Asimismo, consideró que se apueste por el desarrollo integral de las escuelas con capacitaciones permanentes para la recuperación de los contenidos de los programas de estudio rezagados y se regularicen los mismos ante la opinión pública y que son elementos esenciales del sistema educativo tradicional.
Para Isabel Fuentes Juárez, madre de familia de la comunidad de San Bartolo en Pachuca que permitió que su hijo se ausentara de la escuela durante la pandemia, la mayoría de los docentes no estaban preparados para impartir clases en línea, por lo cual decidió dejar el sistema escolar de forma temporal y reanudarla con la presencialidad.
“Mi hijo no estaba aprendiendo nada, porque su maestra no estaba preparada, y la verdad no tenía caso, porque estábamos gastando mucho dinero, mejor decidimos esperarnos a que regresaran las clases presenciales”, relató la madre de familia, quien aceptó que pese a que su hijo estaría por cursar el sexto y último grado de primaria, ahora deberá hacerlo en cuarto de primaria con una desigualdad ajustada en las edades de los estudiantes.
“Ahorita esperamos que los maestros les puedan dar los contenidos pendientes, porque hemos visto algunos problemas que no se atendieron de forma precisa”, narró la madre de familia, quien lamentó que el sistema educativo mexicano no estuviera preparado para impartir las clases de forma específica.