Dejarse de “Grillas”, pide Julio Menchaca
Por Carlos Camacho
En su personal ruta rumbo al 2030, para convertirse en gobernador de Hidalgo, el senador de la República, Cuauhtémoc Ochoa Fernández, comenzó sus primeros rounds de sombra y eligió como su sparring al secretario de Gobierno, Guillermo Olivares Reyna, a quien acusó de amedrentar a alcaldes que intentar hablar con él legislador en su calidad de presidente de la Comisión de Hacienda, para trocar apoyos extraordinarios a cambio de votos para su causa en la renovación del poder ejecutivo estatal dentro de seis años.
Y para ello, Ochoa Fernández, eligió al portal de noticias IM Conectados, con importante presencia local en la región de Tizayuca, desde donde advirtió a Olivares Reyna que de seguir amenazando a los presidentes que han osado acercarse a él en la sede del Senado de la República, podrían enderezarse investigaciones en su contra con respecto al manejo de los recursos públicos de que dispone para sus tareas como encargado de la política interior del estado de Hidalgo.
Tuvo cuidado de no confrontarse directamente con el gobernador Julio Menchaca Salazar, al señalar que con él trabaja de la mano en favor de los hidalguenses, pero no tuvo tiento en lanzar sus obuses contra el originario de Doxey, municipio de Tlaxcoapan.
Dijo saber que a algunos alcaldes les han amenazado por pretender visitar al presidente de la Comisión de Hacienda en el Senado de la República, en busca de algún beneficio para sus municipios.
“De manera frontal”, le dijo que “una cosa es ser del mismo partido y otra no ser crítico y el secretario de Gobierno debería buscar la gobernabilidad del estado, en lugar de amenazar a quienes vienen a buscar un beneficio, a quienes se les ha advertido que tendrán un castigo por parte del gobierno.
“No se le olvide que él también tiene presupuestos que pueden ser revisados por la Auditoría Superior de la Federación (ASF). Así como él amenaza a presidentes, yo le digo usted también tiene mucho de dónde podemos desde el Poder Legislativo buscarle si tiene algo usando el poder público para pretender que de ese lado se pueden obtener beneficios para Hidalgo, le lanzó.
“Todos tenemos un límite de tiempo y los puestos son para servir, no para servirnos”, selló las críticas.
En las reacciones posteriores, el secretario de Gobierno, calificó como “desafortunadas” las declaraciones del todavía líder del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), en Hidalgo, a pesar de ser senador de Morena.
El gobernador Julio Menchaca tuvo que salir al quite y en declaraciones periodísticas defendió a su colaborador a quien calificó como “un funcionario de primer nivel, profesional” a quien le reiteró su confianza, además de pedir que “a la brevedad” cualquier persona que se vea amenazada de cualquier forma, el propio gobernador estará en la disposición de escucharlos y debe tener el valor civil de denunciar, pues de lo contrario sólo queda en meros comentarios.
Pidió a todos dejarse de “grillas” y ponerse a trabajar en favor de todos los hidalguenses.
En la prensa el trato para ambos personajes (Cuauhtémoc Ochoa y Guillermo Olivares) fue muy disparejo, pues pocos fueron los comentarios en favor del senador, que lo mismo transitó por el gobierno priista de Miguel Ángel Osorio Chong, a quien acompañó en el gobierno federal de Enrique Peña Nieto, como subsecretario del Medio Ambiente y luego se separó cuando prefirió apoyar la precandidatura presidencial de Luis Videgaray que la de su jefe político, Osorio Chong.
La defensa más apasionada vino del portal denominado “El Reportero” donde se consideró a Olivares Reyna como “un hombre preparado, sencillo y siempre atento para escuchar y atender las necesidades de los hidalguenses”.
Y siguió la cauda de elogios:
“Jamás se había tenido un secretario de Gobierno del estado de Hidalgo sencillo y atento, mucho menos honesto y preocupado por el bienestar de su pueblo”.
Aunque, como encargado de la política interna del estado, ha cometido sus yerros y entre ellos se recuerda el intento de retención que sufrió en la huasteca el gobernador Julio Menchaca Salazar, por vecinos de Santa Teresa, municipio de Yahualica, durante una gira de las llamadas “Rutas de la Transformación”.
Otro más ocurrió días después en Molango, donde hubo protestas, que no se contuvieron por la falta de trabajo política para prevenir incidencias durante las visitas del ejecutivo estatal a los diversos municipios del estado.
Uno más, que lo llevó a confrontarse con el Oficial Mayor Edgar Orlando Ángeles Pérez, por el manejo de los recursos para pagar los convenios de publicidad, a los medios de comunicación de la entidad, que provocaron la salida del coordinador de comunicación gubernamental, Eduardo Iturbe Méndez, sustituido por quien era director del diario El Universal de Hidalgo, Jorge Martínez López.
Entonces Olivares Reyna, informó que la salida de Iturbe Méndez no era por irregularidades en el manejo de los convenios y los recursos, sino a una estrategia de gobierno y el funcionario que salía iría a una importante tarea en el Poder Legislativo estatal.
Al respecto y a pregunta expresa, el coordinador de Morena y presidente de la junta de gobierno del Poder Legislativo, Andrés Velázquez Vázquez, negó que Iturbe Méndez hubiera sido invitado a colaborar en el Congreso local.
En un encuentro con periodistas de la entidad, Olivares Reyna insistió en que Eduardo Iturbe iría al Congreso local, donde no se ha confirmado su llegada aún.
Por otro lado, pareciera que uno de los destinatarios del mensaje enviado por el gobernador Julio Menchaca, en su segundo informe de actividades, el 5 de septiembre pasado, contra quienes “gustan de arrancar hojas al calendario”, es el propio Cuauhtémoc Ochoa, quien con sus invectivas contra Olivares Reyna, también confirma que al interior de Morena no todo es miel sobre hojuelas y del grupo del ejecutivo estatal, hay quienes no ven con buenos ojos a uno de los consentidos del senador Adán Augusto López, quien, a su vez, ha hecho migas con el Grupo Universidad, otro antagónico del grupo dominante en Morena-Hidalgo.