Por Carlos Camacho
En los siguientes días deberán definirse nombres de los candidatos a las presidencias municipales de los 84 municipios de Hidalgo y para el caso de Huejutla, corazón de la huasteca, los astros parecen alinearse en favor de José Alfredo San Román Duval, que en la más reciente encuesta aparece con el 61 por ciento de las preferencias ciudadanas, muy por encima de otros adversarios como Gabriel Ramos Moguel y Carlos Fayad.
La disputa parece cerrarse sólo a dos aspirantes del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena): Gabriel Ramos Moguel, hermano de Marco Antonio, quien ya gobernó ese importante municipio hidalguense y es ahora funcionario del gobierno estatal en la región huasteca.
Y el segundo, que parece que será el primero, es precisamente San Román Duval, conocido coloquialmente como “Carretas”, empresario vendedor de materiales para construcción y que ya gobernó Huejutla en dos ocasiones con diferente partido.
Primero lo hizo como abanderado del Partido Acción Nacional (PAN), en el periodo 2003-2006 y luego con Convergencia (hoy denominado Movimiento Ciudadano), en el trienio 2012-2016, eso le trajo simpatías, aunque también críticas.
También se le acusó de haber cometido irregularidades con el manejo de los recursos públicos. Al final resolvió sus asuntos y hoy se apresta, por tercera vez, a buscar la alcaldía del corazón de la huasteca.
Las negociaciones en Morena se han intensificado y los siguientes 10 días serán cruciales, pues al parecer en ese lapso de tiempo se definirán candidatos en varios municipios, incluido Huejutla.
Alfredo San Román, cuenta con el respaldo de personajes de la política local y estatal y en el caso de Huejutla, quienes aspiraron en el periodo que está por concluir a la presidencia municipal, se ha manifestado a su favor.
Además de tener de su lado al presidente municipal actual, Daniel Andrade Zurutuza, quien, a su vez, aspira a ser candidato a diputado federal, o de perdida local, bajo las siglas de Morena.
A Gabriel Ramos Moguel, le han ofrecido también un espacio de representación popular, no necesariamente la alcaldía, pero parece que se resiste e insiste en querer emular a su hermano y gobernar su municipio los próximos tres años.
El estira y afloja se intensifica.
