Por Carlos Camacho
En la edición del 8 de agosto, se hizo aquí un recuento de la cadena de protestas ciudadanas en contra de las autoridades del municipio de Huejutla y de la desatención a los grupos campesinos y comunidades por parte del alcalde Daniel Andrade Zurutuza. Incluso, hay videos en los que se observa el jaloneo entre el alcalde y quienes lo encararon en la misma presidencia municipal, para exigirle cumpla con sus promesas de campaña.
Incluso, se hizo referencia a la intención de acallar a los medios para que no se difundieran las manifestaciones ciudadanas en contra del munícipe, emanado del Partido Encuentro Social (PES).
Ayer, el área de comunicación social del ayuntamiento de Huejutla, envió una réplica, de la que aquí se exponen los puntos sustanciales.
Dejamos claro que, en ningún momento el Gobierno Municipal se ha negado al diálogo, y tampoco se han desatendido las- peticiones de las comunidades.
Puntualmente en el caso de Tlalnepanco, Xochititla, Acayahual, Tepeyacapa y Ahuehuetitla; la gestión de la carretera lleva más de 40 años, esa petición estuvo en el olvido y el desinterés de los gobiernos; en esta administración, el alcalde Daniel Andrade, realizó la gestión ante el gobierno estatal para la construcción de la primera etapa de la carretera; con el acuerdo de que el gobierno municipal también destinaría una inversión del mismo monto, para avanzar aún más con el tramo de construcción en este ejercicio fiscal.
La más reciente reunión con el grupo -previo a la protesta- se estableció el pasado 1 de agosto en las instalaciones del palacio municipal, donde precisamente se informó a la población inconforme, la situación de su obra y se reiteró la inversión de 3 modo que realizaría la administración municipal, una vez que concluya el tramo estatal que -cabe mencionar- se encuentra en el ejercicio que culmina el próximo mes de octubre.
En dicha mesa de trabajo se establecieron acuerdos mismos que, vecinos acordaron, se revisarían con la comunidad para posteriormente ser firmados por las autoridades faltantes, en este caso, las autoridades de las comunidades.
Dejamos claro que, en todo momento hemos apoyado la diversidad de opiniones y hemos mantenido diálogo basado en hechos y argumentos sólidos.
Como gobierno municipal respetamos el derecho a la protesta pero no estamos de acuerdo con actos que atenten contra los derechos de terceros y pasen por alto la ley.
Somos una administración respetuosa del derecho a la libre expresión de las ideas, en el entendido de que dicho ejercicio se debe realizar de manera profesional y apegada a la realidad para así evitar controversias que no abonan a mantener la paz social en el municipio.
Hasta aquí la réplica.
Nada se habla en ella del conflicto en Coacuilco donde el alcalde pretende imponer como delegado a un “incondicional”, lo que generó protestas y bloqueos carreteros, a las que se sumaron los vecinos de la comunidad de Ixcatlán.