Por David Rodríguez
A unos meses de que concluyan los gobiernos municipales en Tlaxcala, en el ayuntamiento capitalino existe un hedor de corrupción que podría complicar la continuidad de Morena en el gobierno por los próximos tres años.
Y es que el Comité de Transparencia del ayuntamiento de Tlaxcala reservó por cinco años, 14 expedientes con información relacionada con contratos millonarios para la adquisición de bienes, servicios, permisos, la concesión y operación del polideportivo “Carlos Castillo Peraza”, so pretexto de garantizar la estabilidad social en la capital del estado.
En el 2021, el Instituto Nacional para el Federalismo y el Desarrollo Municipal, analizó la importancia de transparentar y rendir cuentas a la ciudadanía y concluyó que, esos principios, son pilares imprescindibles de la gestión pública para generar confianza entre los ciudadanos, que a la vez son contribuyentes.
Dicho de otra manera, si las autoridades municipales no son transparentes en el ejercicio de los recursos y la toma de decisiones, los contribuyentes podrán, con todo derecho, rehuir a pagar sus impuestos por la falta que confianza que tienen hacia quienes son los responsables del manejo claro y eficiente de los recursos públicos.
Alguna vez el presidente de México Andrés Manuel López Obrador dijo en una de sus mañaneras que “la gente se cansa de tanta pinche transa”, pero ni al presidente con licencia Jorge Corichi, ni a la alcaldesa que lo sucedió en el cargo, Maribel Pérez Arenas, les importa esa máxima porque será hasta el 2028 cuando la gente pueda conocer la información que decidieron reservar sobre los contratos millonarios que firmaron para beneficio de ellos mismos.
De otra manera no se puede entender y mucho menos justificar la reserva de información como el padrón de centros botaneros, bares y antros, el contrato y costo para la remodelación de la plaza de la Constitución, especie de plantas, árboles adquiridos, costo unitario, de la mano de obra y nombre de la empresa responsable de ese proceso; ni el contrato de arrendamiento de los vehículos tipo patrullas que se otorgaron a la Dirección de Seguridad.
¿Por qué la ciudadanía no puede saber en este momento y sí hasta dentro de cinco años, las razones que motivaron a la autoridad municipal concesionar el polideportivo, el tiempo de ese contrato, el beneficio económico para el ayuntamiento y la empresa que se hizo responsable del manejo de ese inmueble?
¿Por qué tampoco puede consultar los procedimientos de licitación y contratos de adquisición que, en el 2022, celebró el ayuntamiento de Tlaxcala en materia de suministro y colocación de luminarias y sobre el derecho al alumbrado público?
¿Qué información que tiene que ver con actividades y contratos de la presidencia de San Gabriel Cuauhtla y la documentación de San Lucas Cuauhtelulpan, oculta el ayuntamiento de Tlaxcala que no puede revelarse sino hasta dentro de cinco años?
¿Cuál es la razón por la que hasta el 2027 se pueden conocer los detalles del contrato para la adquisición de las letras talladas de madera que se encuentran frente a la presidencia municipal y los planes autorizados para la prepa Ibero?
Lo único que sí está claro es que, al menos en la capital del estado, Morena no fue la solución, el PRI tampoco atendió las necesidades de los tlaxcaltecas y el PAN también quedó a deber.
Es más, no creo que sea una cuestión de partidos, sino más bien, creo que se trata de ética, de moral, de compromiso real con la ciudadanía y de servir verdaderamente con ahínco a aquellos que los eligieron para representarlos dignamente, como lo dijo la gobernadora Lorena Cuéllar cuando pidió a los alcaldes pensar en cumplirle al pueblo antes que pensar en otorgarse bonos por la conclusión de las administraciones.
PUNTO Y APARTE
En Movimiento Ciudadano dejaron fuera a un par de perfiles que buscaban la candidatura al Senado y que bien pudieron posicionar al partido con la base que se llevaron de otras fuerzas políticas hacia el partido naranja.
El partido le apostó a la ex magistrada y amiga Eréndira Jiménez Montiel, ex candidata a la gubernatura, Elsa Cordero Martínez para encabezar la primera fórmula al Senado y a un tal Alfonso González como segunda fórmula a la Cámara Alta.
En los distritos federales, el partido se decantó por Delfino Suárez Piedras, político de mucha experiencia en el distrito 01; en el 02 Danae Figueroa y en el 03, la ex priísta Rosa Isela Sánchez Rivera.
