Fuga de cerebros

Por Carlos Camacho

No es nuevo, ha sido una constante que los egresados de las instituciones de educación superior en la entidad, tengan que emigrar a otros estados de la República o, incluso, al extranjero en busca de las oportunidades negadas en su tierra de origen.

Por ejemplo, en la huasteca, se dio un auge a las escuelas relacionadas con la salud, medicina y enfermería, lo que provocó la “producción# de un buen número de médicos y enfermeras que al salir de sus escuelas y buscar empleo, simplemente no lo encontraron y tuvieron que emigrar o de plano buscarse oportunidades con menores ingresos en otras actividades ajenas a sus estudios.

El tema ha sido replanteado en el nuevo gobierno y el titular del poder ejecutivo estatal, Julio Menchaca Salazar, ha sostenido que el sector educativo será prioridad en su gestión y para ello destinará el 42.% de su presupuesto anual, equivalente a 27 mil millones de pesos.

Reconoció que las necesidades más sentidas de los hidalguenses, tienen que ver con el sector educativo y dijo que asumen el compromiso con el propósito de modificar las condiciones actuales de la educación en Hidalgo, en todos sus niveles.

En el marco del 18 aniversario del Colegio del Estado de Hidalgo, aceptó que ha habido descuido en la zona metropolitana y respecto al tratamiento de las aguas residuales en la región de Tula, donde el desborde del río Tula provocó una tragedia, que se extendió a nueve municipios más.

Para atender y resolver estos temas, se anunció una cátedra de estudios regionales que impartirá  Carlos Martínez Assad, egresado de la UNAM, quien es experto en el estudio de problemas regionales.

Su experiencia le ha llevado a realizar estudios en el Valle del Mezquital, donde hay muchas oportunidades de desarrollo y la vida de los lugareños no debe girar en torno a las remesas que envían sus familiares que radican y laboran en los Estados Unidos.

Por todo ello, el gobierno de Julio Menchaca le apostará a la investigación, a buscar que los jóvenes egresados de las escuelas de educación superior, se arraiguen en sus lugares de origen y no tengan que emigrar a otras latitudes en busca de las oportunidades negadas por muchos años en su propia tierra.

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