Por Carlos Camacho
Acusaciones vienen, acusaciones van, pero todo, al final, quedará en el anecdotario como parte de la lucha que libran partidos y candidatos que se disputan los cargos de elección popular que se definirán en la jornada del domingo 2 de junio.
Por ejemplo, el dirigente estatal de Morena, Marco Antonio Rico Mercado, denunció rebase en gastos de campaña de al menos cinco candidatos como Francisco Hernández Hernández, candidato independiente a la alcaldía de Tepeapulco; Noé Paredes Meza, otro independiente que busca la alcaldía de Tula d Allende; Guillermo Sanjuanero Maldonado, candidato a diputado local por el distrito 17 de Mineral de la Reforma.
En este mismo contexto se enmarca la disputa electoral entre los dos principales aspirantes a la presidencia municipal de Pachuca, Jorge Reyes Hernández y Benjamín Rico Moreno, ambos acusados de presuntos ilícitos y de sufrir una guerra sucia a través de las redes sociales.
La candidata de Morena a la alcaldía de Huazalingo, Yessica Cortez Baltazar, fue más allá del plano electoral al denunciar al actual presidente municipal, Julio César González García, por su presunta participación en la “Estafa Siniestra”, para la que habría desviado 18 millones de pesos.
Dice que la información para involucrar al edil, le llegó de mañanera anónima a su domicilio en un sobre amarillo.
En Mineral de la Reforma, hubo agresiones e insultos entre las porras de los candidatos del PAN y Morena a la alcaldía, Jahir García y Eduardo Medécigo. De hecho, el primero acudió a presentar una denuncia penal por los datos ocasionados a su vehículo. En esa demarcación ambos candidatos se anticipan ganadores de la contienda del 2 de junio.
Esta vez el ring preferido de candidatos y partidos para los ataques escudados en el anonimáto9 ha sido las “benditas redes”, a través de las que se busca modificar el ánimo ciudadano en contra del agraviado y en favor del agresor.
Sólo que, la mayoría de los votantes difícilmente se detendrá primero a revisar cuentas en las redes sociales y luego a evaluar qué tanto de ciertas tienen las acusaciones. La gran mayoría resta importancia a estas estrategias y atiende más al partido y, para el caso de las elecciones municipales, al candidato.
Así pues, que para el 3 de junio, todos los ataques durante las campañas, quedarán como meras anécdotas y difícilmente algunas acusaciones que pretenden convertirse en cárcel para los señalados, prosperarán y todo quedará en la guerra mediática entre partidos y candidatos.
