Por Carlos Camacho
En su desesperación por la prolongada escasez de agua en sus domicilios, primero han salido a bloquear carreteras los vecinos de Pachuca y Mineral de la Reforma, luego han sido recientemente los de Tepeapulco, ayer los de Singuilucan y hoy los de Ajacuba, todos con un reclamo coincidente: ¡agua!
Los problemas derivados de la temporada de estiaje, de las altas temperaturas y las deficientes redes de distribución de agua potable en las zonas urbanas, han ocasionado el desabasto del vital líquido, a pesar de las acciones del gobierno que van desde la perforación de nuevos pozos, las campañas para invitar a los consumidores a racionar el consumo y evitar desperdicio.
NO han sido suficientes estas medidas y la gente sigue saliendo a las calles a reclamar con desesperación la disposición de agua para sus hogares. En Singuilucan hablan de meses sin el servicio regular y de las 34 localidades, sólo cinco tienen suministro.
Ante el temor de que las autoridades cumplan con el ofrecimiento de llevar agua de Hidalgo a la Ciudad de México, los habitantes de Tepeapulco, tomaron los pozos de Corralillos, hasta obligar a las autoridades a no llevarse agua a otro sitio sin antes garantizar el abasto de los habitantes de Tepeapulco.
El tema, como ya se ya repetido en este espacio, es ya bandera de políticos y candidatos a cargos de elección popular que en Hidalgo se han comprometido a defender el agua y oponerse a que se la lleven a otros lugares, como ya ocurre con el agua de Zimapán, que se llevan a Querétaro.
A pesar de que desde hace por lo menos dos décadas, los habitantes de ese municipio de la sierra gorda, padecen del suministro suficiente debido a que sus pozos están contaminados con arsénico y hacen imposible el consumo humano.
Hoy, productores del campo en Ajacuba, se manifestaron frente a las oficinas de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) para exigir agua de riego para sus cultivos y amenazaron con extender sus protestas hasta la carretera federal México-Pachuca, si no tenían una respuesta satisfactoria a sus demandas.
Ayer en San Luís Potosí, la candidata presidencial de la coalición “Sigamos Haciendo Historia”, Claudia Sheinbaum, quien por cierto, hoy visita la huasteca hidalguense, anticipó ya un plan nacional hídrico para atender el problema que afecta a casi todo el país.
Concretamente propone, de ganar la presidencia de la República, la revisión de las concesiones, modificaciones a la Ley Nacional de Aguas para frenar la privatización que comenzó en el gobierno de Carlos Salinas de Gortari; limitar el esquema de privatizaciones; inversión en la red de infraestructura, en pozos y la red hidráulica.
Los otros dos candidatos, Xóchitl Gálvez y Jorge Álvarez Máynez, no han sido puntuales en sus planteamientos al respecto y el domingo 28 de abril, en el segundo debate, tendrán la oportunidad de fijar su postura al respecto.
