Por Miriam Camacho
En 9 de mayo pasado el Centro de Control, Comando, Comunicaciones, Cómputo, Coordinación e Inteligencia (C5i) de Hidalgo, cumplió 4 años de operación, fue inaugurado por el presidente Andrés Manuel López Obrador cuando Omar Fayad Meneses fue gobernador de la entidad y al parecer es uno de los espacios que sí ha dado resultados en cuanto a seguridad; sin embargo, la percepción de la ciudadanía al respecto, no ha cambiado pues continúan asumiendo que el principal problema en Hidalgo es la inseguridad.
De acuerdo con datos de la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE) 2022 realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) el 56.4 % los hidalguenses consideran la inseguridad como principal preocupación y los delitos más frecuentes son la extorsión, el fraude, así como el robo o asalto en la calle o en el transporte público.
El ambicioso proyecto que tuvo una inversión inicial superior a los 600 millones de pesos pretende contribuir con el desarrollo de investigaciones y el auxilio a la población en caso de emergencias, aún está en proceso de consolidación, pero por su estructura y avance tecnológico, está considerado como uno de los mejores a nivel Latinoamérica, compite en similitudes con el de Michoacán y el de Cancún, Quintana Roo.
Entre los resultados más destacables en cuanto a prevención, inhibición y combate a la delincuencia, la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo reportó que, desde septiembre de 2022 hasta la fecha, se recibieron 65 denuncias relacionadas con el robo de hidrocarburo, lo que permitió la localización de tres huachi-túneles, la detención de 152 personas, el aseguramiento de 54 vehículos, unos 25 kilogramos de sustancias ilícitas y más de 565 mil litros de combustible.
El C5i de Hidalgo está construido en un terreno de 36 mil 836 metros cuadrados, en el municipio de Zempoala, con un diseño circular que consta de tres niveles, dos de ellos subterráneos, ahí trabajan alrededor de 300 empleados, entre ellos personal con discapacidades y en silla de ruedas, además de trabajadores que hablan las lenguas maternas más representativas de Hidalgo.
El innovador espacio cuenta con una sala de monitoreo con muro de video que consta de dos mil 40 paneles LED en 510 módulos, es ahí donde especialistas visualizan las imágenes captadas por las más de cinco mil cámaras de videovigilancia instaladas en 21 municipios, y si hay problemas generan alertas o guían a policías quienes, a bordo de sus patrullas, emprenden persecuciones para capturar a los presuntos responsables de delitos o previenen el acto.
El proyecto inicial también consideró la operación de 38 arcos carreteros que sirven para la detección de vehículos relacionados con actividades ilícitas, 20 drones para el apoyo de operatividad de agentes en campo y un avión táctico con cámara térmica para labores de investigación, conocido como «sigiloso«, sin embargo, no hay un reporte preciso de qué resultados han dado estas tecnologías.
Este centro es el único en el país donde se integran base de datos, registro de placas, registro público de propiedad, registro civil, ordenes de aprehensión, permisos de portación de armas, entre otros, además, recibe la señal de mil 255 botones de pánico-alertamiento ubicados en puntos de monitoreo estratégicos colocados en las cámaras, al tiempo que recibe la señal de 30 mil alarmas vecinales instaladas en colonias consideradas vulnerables a la delincuencia.
En cuanto a datos, Hidalgo sigue siendo uno de los estados más seguros del país, de acuerdo con el Índice de Paz en México, la entidad se ubica en el quinto lugar en este rubro, sin embargo, la administración pasada recibió al estado siendo el cuarto lugar y durante la gestión de Omar Fayad osciló entre el sexto y quinto lugar por lo que se concluye que pese a la tecnología aplicada en el combate a la delincuencia, la percepción no ha cambiado y los índices nacionales tampoco.